Los centros podrán solicitar las ayudas del 2 al 30 de septiembre. La subvención tiene en cuenta el material que no es subvencionado por otras administraciones y que resulta necesario para el desarrollo de las distintas actividades escolares en las que trabajará el alumnado durante el curso. Esta ayuda contempla los gastos relativos a actividades complementarias (autocares, entradas a museos, teatros, granja escuela o cualquier otro tipo de salida) evitando así que haya alumnado que no pueda acudir a las excursiones con el resto de sus compañeros y compañeras.

El programa de subvención directa a los centros permite que estas ayudas repercutan directamente en el máximo número de alumnos posible. "El inicio del curso no supone solo comprar libros y cuadernos, sino que a lo largo del curso hay salidas o excursiones y material complementario que en algunas ocasiones suponen que se aísle a algunos niños cuyas familias no tienen el poder adquisitivo para afrontarlas", destacó la concejala de Educación, Virginia Jiménez.

También se contemplan aquellos gastos de libros de texto no recogidos en la Ley de Gratuidad de libros de texto y el material curricular de la Comunidad de Madrid o el material escolar que debido a su vigencia menor a cuatro años no es objeto de subvención por parte de otras administraciones.

Asimismo, la responsable del área también destacaba que con esta fórmula "se fomentan los bancos de libros y el intercambio" ya que "gracias al trabajo conjunto que hacen los equipos directivos, los AMPAS y las ayudas del Ayuntamiento y la Comunidad de Madrid en muchos colegios las familias no tienen que comprar ningún libro", señaló.

Esta ayuda se entregaba a título personal hasta el curso 2016-2017, cuando el Ayuntamiento aumentó la cuantía de 300.000 a 400.000 y pasó a concederse directamente a los centros con el objetivo de mejorar el control, la eficiencia y el trabajo directo que los colegios e institutos realizan directamente con el alumnado debido al mayor conocimiento que el profesorado y los responsables de los centros tienen de los estudiantes y sus familias.

De esta forma las ayudas se conceden siguiendo un baremo que tiene en cuenta circunstancias como el número de alumnado perteneciente a familias receptoras de la Renta Mínima de Inserción (RMI), en situación de intervención social, alumnado tutelado o con condición de víctima de violencia de género, entre otros requisitos.