Se están filtrando determinadas impresiones desde el Tribunal Supremo que consideran conveniente hacer público el escrito en cuanto esté terminada la sentencia de manera definitiva del Procés catalán, según publica este jueves el Confidencial Digital. “El Supremo apuesta por adelantar la publicación de la sentencia y así evitar grandes movilizaciones y hasta ‘parálisis’ por el 1-O -escribe el medio conservador- Dan por hecho que habrá protestas, manifestaciones y quejas por parte de los independentistas, pero consideran que puede ser positivo un adelanto a agosto, cuando buena parte de la población está de vacaciones y no tan movilizada”. Según el mismo diario, esto impulsaría a Pedro Sánchez a conformar gobierno cuanto antes y no arriesgarse a unas segundas elecciones. Dado que para afrontar esta situación se necesita un gobierno ya estable y en marcha. Según el mismo medio la decisión primordial de adelantar la sentencia sería del juez Manuel Marchena.

Sin embargo, y dados los últios acontecimientos, desde la negativa del 23 de julio a sustentar un gobierno socialista por parte de Podemos y posteriormente la nueva oferta, apenas idéntica de este martes, contestada por el Psoe en la que insiste que lo más viable y sano para ambas partes es un Acuerdo Programatico, a estas alturas del partido, la posibilidad de que Pedro Sánchez convoque elecciones es algo más que una suposición. Empieza a ser un grito a voces que el Presidente en funciones no considera estable para España formar gobierno sin unas nuevas elecciones que le legitimen ante el escenario que va a significar la sentencia del ‘procés’.

El auto que provocó estupor en el mundo jurídico decía lo siguiente: “Este momento del proceso sitúa a la Sala en una posición privilegiada, hasta ahora inédita, para valorar la intensificación del fumus boni iuris que ha venido sosteniendo las medidas cautelares acordadas por el Excmo. Sr. Magistrado instructor (Pablo llarena) y ratificadas por la Sala de Recursos”.

Hay que tener en cuenta que la expresión fumus boni iuris es un aforismo latino que se traduce habitualmente en el mundo forense como “apariencia de buen derecho”, y que permite al juez de instancia adoptar una medida cautelar antes de la sentencia al presumir, aunque sea con carácter meramente provisional e indiciario, que el demandante puede tener razón.

El desliz del auto de Manuel Marchena fue precisamente la referencia que hizo a “la intensificación del fumus boni iuris”, con lo que vino a decir que la prisión de Oriol Junqueras gozaba de apariencia de buen derecho y que por tanto podía presumirse su culpabilidad, y encima intensificada, lo que no dejaba de ser un disparate.

Con todos estos antecedentes, es lógico sospechar por qué Pedro Sánchez no quiere formar nuevo Gobierno sin saber antes cuál va a ser el contenido de la sentencia del ‘procés’. Por otro lado, es de suponer que Manuel Marchena sí que tiene interés en que se forme cuanto antes el nuevo Gobierno, para que se le nombre a él presidente del nuevo Consejo General del Poder Judicial.