Este sábado se ha producido el segundo rescate en apenas 24 horas en el Mediterráneo central. El barco humanitario "Ocean Viking" atendía a cerca de 80 personas, tal y como han indicado las ONG Médicos Sin Fronteras (MSF) y SOS Mediterráneo.
Las ONG, Médicos Sin Fronteras (MSF) y SOS Mediterráneo, han confirmado que el barco humanitario "Ocean Viking" ha efectuado este sábado su segundo rescate en apenas 24 horas al atender a cerca de 80 personas en el Mediterráneo central.
Los migrantes se suman así a los rescatados el viernes, por lo que los refugiados a bordo del "Ocean Viking", que se encuentra en estos momentos a la deriva en el mar, son ya 165. Médicos Sin Fronteras ha advertido que "seguiremos en la zona de rescate para ayudar a quien lo necesite", y que su prioridad es desembarcar a estas personas en "puerto seguro".
Así fue el rescate
MSF explicaba a través de Twitter cómo se había efectuado el rescate a este segundo grupo de inmigrantes que iba en una embarcación de goma y se encuentra ya a salvo a bordo del "Ocean Viking".
El pasado viernes, el buque humanitario ya había rescatado a 85 personas en esa misma zona, en aguas internacionales frente a la costa de Libia, pero fueron alertados de una segunda embarcación apenas unas horas más tarde. "Casi la mitad son menores que viajan solos, y un preocupante porcentaje tiene entre 13 y 15 años", han informado las ONG.
"Nuestra prioridad es desembarcar a estas personas en un puerto seguro. El "Ocean Viking" es un barco de emergencia y no tenemos la capacidad para atender médica y psicológicamente a estas personas a bordo de manera prolongada", ha advertido la portavoz de MSF, Hannah Wallace.
Wallace ha señalado que estos migrantes "han pasado por situaciones de violencia terribles en su camino a Europa", y ha destacado que "es necesario un puerto seguro para desembarcarlas y no prolongar el trauma que ya cargan".
Al límite de la sobrecarga
Aunque MSF ha informado que el "Ocean Viking" seguirá en la zona para ayudar a los migrantes, también ha advertido de que está al límite de la sobrecarga. Y es que, con 170 personas a bordo, su máximo permitido de pasajeros es de 200.
Por su parte, el ministro del Interior de Italia, Matteo Salvini, ha anunciado que no autorizará la entrada del barco en aguas territoriales de Italia, "en virtud de una ley antiinmigración que castiga con hasta un millón de euros a las ONG que rescatan migrantes y refugiados en el Mediterráneo".
Salvini también ha apuntado que no permitirá la entrada del barco de "Open Arms", que lleva 160 migrantes, mientras se incrementa la presión sobre los gobiernos europeos para que den una "respuesta a esta situación".