Isabel Galvín, secretaria de Enseñanza de CCOO en Madrid, ha calificado este lunes de “fracaso y fraude a las familias” el actual calendario escolar propuesto por la Consejería de Educación, que adelanta los exámenes de recuperación de septiembre a junio. Según indica la secretaria, con este calendario “los programas se dan comprimidos porque hay un mes menos de clase”. Asimismo, señala que “a los alumnos aprobados no se les puede obligar a ir a clase, ya que las actividades alternativas complementarias, talleres, etc, no son obligatorias”.

Galvín responde de esta manera al consejero de Educación, Rafael van Grieken, quien defendía el adelanto de los exámenes de recuperación destacando que “13.000 alumnos más promocionaron de curso en 2017-2018”.

Ya en 2017, CCOO recurrió este nuevo calendario ante el TSJM, siendo finalmente desestimado ya que, según palabras de Galvín, “el Tribunal consideró que este sindicato no tiene legitimación activa para recurrir”. Sin embargo, continúan luchando por ello: “Hoy mismo hemos exigido a la Consejería que facilite los datos que está recogiendo el Servicio de Inspección educativa esta semana, y hemos iniciado una encuesta entre los equipos docentes”, anunciaba.

El sindicato ha querido denunciar el “enorme absentismo” en lo que va de mes, afirmando que “si el coste es que para todo el alumnado se pierde un mes de clase, hay otros métodos para mejorar las tasas de aprobados”.

Paralelamente a las acciones de CCOO, la FAPA Giner de los Ríos también llevan pidiendo la retirada de dicho calendario desde el curso pasado al considerar “claramente insuficiente” el tiempo del alumnado suspendido para prepararse para recuperar una materia, mientras que los ya aprobados dejan de asistir a los institutos. “El alumnado termina antes de lo que le corresponde con el beneplácito del centro”, señalaban desde la FAPA.