La operación denominada "Tiburón", llevada a cabo por el Juzgado Central de Instrucción Nº 1 y la Fiscalía Antidroga de la Audiencia Nacional, comenzó el pasado mes de abril, cuando la Oficina de Inteligencia Marítima de Vigilancia Aduanera en Galicia detecta la entrada de la embarcación Gure Leire en el puerto de A Coruña, despertando las sospechas de sus empleados
Según la investigación, la droga tenía su origen en Sudamérica y el pesquero se dirigía a Galicia para su descarga. Previamente, un buque nodriza que habría salido de las costas de Surinam habría trasladado la carga al pesquero en un punto acordado.
Una vez se estableció el correspondiente dispositivo aeronaval destino a la interceptación, de forma consensuada entre los servicios aduaneros españoles y franceses, el buque Fulmar de la Agencia Tributaria localizó el pesquero, una embarcación de 22 metros de eslora sobre la que ya existían sospechas desde hacía varios años por su posible relación con organizaciones narcotraficantes.
Los funcionarios de operaciones especiales de Vigilancia Aduanera del Fulmar detuvieron a los siete tripulantes de la Gure Leire. Una vez localizaron los 2.500 kilos de droga en la cámara frigorífica del Fulmar, iniciaron la travesía con algunas dificultades que hicieron necesario remolcar el pesquero a baja velocidad durante varios días debido a la posibilidad de hundimiento.
Mientras se llevaba a cabo esta operación marítima, el personal de Vigilancia Aduanera realizaba, bajo orden judicial, el registro de tres domicilios en domicilios en las localidades de Ondarroa y Berriatua.
Tanto la embarcación como los siete detenidos se encuentran en disposición judicial bajo la coordinación del Juzgado Central de Instrucción Nº 1 de la Audiencia Nacional. La operación y las investigaciones continúan abiertas.