Josep Borrel ha ofrecido recientemente una entrevista a Telecinco centrada en el independentismo catalán tras las palabras del primer secretario del PSC, Miquel Iceta, en las que opinaba que, en el caso de una mayoría independentista, la democracia debería encontrar mecanismos.
Durante una entrevista para Telecinco, recogida por Europa Press, Josep Borrell, ministro de Asuntos Exteriores, UE y Cooperación y candidato del PSOE a las elecciones europeas, ha sido preguntado sobre qué debería hacerse si el independentismo en Cataluña llegase al 65%. “No sirve de nada especular”, ha señalado al respecto al creer “casi imposible” que eso ocurra ya que “las encuestas en Cataluña demuestran que los partidarios de la independencia disminuyen”.
Al respecto ha afirmado que el independentismo alcanzó un “pico” del 48% y que ahora está en el 40%, de manera que “de algo ha servido la política de desinflamación”. También ha reconocido que “los que todavía lo son están más radicalizados” y que, a su parecer, los partidos constitucionalistas deberían “entender que es una política de Estado evitar que el independentismo aumente”.
Posteriormente ha sido preguntado por la cifra de indecisos que muestran las últimas encuestas acerca del 28A, que alcanza el 40%. Borrell ha llamado a “abandonar el insulto y la descalificación” y a centrar la campaña en explicar cómo piensa cada uno gobernar.
Borrell ha querido dejar claro que, “gobierne quien gobierne, según el Tribunal Constitucional, cualquier pregunta que afecte a la integridad territorial del Estado se puede plantear, pero solo en el marco de una reforma de la Constitución”, siempre recogiendo la unidad nacional y prohibiendo un referéndum de autodeterminación.
En todo caso, el ministro ha abogado por el diálogo, la firmeza en la defensa de la Constitución y los argumentos para explicar que las supuestas ventajas de la independencia no son ciertas.
También ha sido preguntado sobre la posibilidad de necesitar votos de partidos independentistas para gobernar, a lo que ha contestado que “todo dependerá del reparto de escaños”, puntualizando que “hay que evitar en lo posible que el centro se apoye en los extremos”. Ha añadido que, para eso, la situación “es complicada porque han aparecido actores nuevos, algunos con mucha fuerza y otros que parece que la están perdiendo víctima de una desintegración territorial” (aludiendo a Podemos).
Siguiendo esta línea, Borrell ha calificado de “inexplicable” la posición de Ciudadanos, quienes se presentan como un partido “de centro”, de “excluir cualquier negociación con su ala izquierda”. El ministro lo ha ubicado “fuera de juego” como partido de centro.
Ha señalado que, a su parecer, lo que la formación naranja pretende es hacer que los votantes del PSOE piensen que éste solo podrá gobernar con el apoyo del independentismo.
Por otro lado, el ministro ha quitado importancia a las distintas visiones en el PSOE, pues considera “natural” que, sobre un problema complejo y “poliédrico”, “distintos observadores en distintos momentos puedan emitir opiniones que puedan parecer no exactamente lo mismo”.
Por último, ha finalizado refiriéndose al programa electoral de los socialistas, justificando que no se hable de Cataluña porque “no se dice nada distinto de lo que se dice del resto de las comunidades autónomas" ya que el sistema autonómico es el mismo para todas y el PSOE apuesta por "perfeccionarlo frente a quienes quieren hacerlo retroceder, quitar competencias o aplicar el artículo 155 de la Constitución”.