Acción contra el Hambre ha pedido "generosidad" a la comunidad internacional, reunida en Bruselas en una Conferencia sobre la situación de Siria, para financiar ayuda humanitaria en el país y los países vecinos. Denuncian que tras la Conferencia pasada sólo financiaron el 62% de lo que pedían las organizaciones humanitarias.
Este martes ha comenzado en Bruselas la tercera Conferencia ‘Apoyar el futuro de Siria y su región’ , una cita internacional de máximo nivel cuyo objetivo es conseguir apoyo político y financiación hacia Siria y sus países vecinos.
La presiden la UE y la ONU y acuden representantes de la sociedad civil de Siria y su región, ministros y responsables políticos de los países vecinos de Siria, países donantes, organizaciones regionales, agencias de la ONU, Cruz Roja y Media Luna Roja, entre otras muchas organizaciones.
En este contexto, Acción contra el Hambre (ACH) ha pedido “generosidad” a los gobiernos que asisten a la Conferencia, pues, según ha denunciado, en 2018 se cubrió el 62% de la financiación exigida por la comunidad humanitaria, y que “combinen la ayuda de emergencia con la construcción de resiliencia”.
“La crisis no ha acabado en Siria”, ha explicado la responsable geográfica de ACH para Siria y la región, Chiara Saccardi, en una nota de prensa. “La situación no cambiará de la noche al día. Siria es un país devastado, ocho años de conflicto han destruido mercados, medios de vida, infraestructuras de agua… Volver al punto de partida llevará tiempo”, ha subrayado.
No "precipitar" el retorno
La organización ha llamado a “no precipitar el retorno” de los sirios a sus hogares porque la “gran mayoría” de los que volvieron en 2018 no tenían servicios de salud, educación, agua y saneamiento básico, y que antes es “clave” que se finalice la limpieza de explosivos en cada zona porque “una de cada dos personas” que vuelve está expuesta a los riesgos asociados a minas y restos de explosivos.
Saccardi ha destacado además que estos retornados no son refugiados que han salido fuera de Siria, sino desplazados internos, con “más dificultades para acceder a la ayuda internacional”.
En cualquier caso, recuerda la organización, todavía hay más desplazados que retornados (1,63 desplazamientos frente a 1,4 retornos).
Los camiones cisterna no son "sostenibles"
Acción contra el Hambre ha llamado a la comunidad internacional a financiar de manera prioritaria la rehabilitación de las redes de agua destruidas y los sistemas de saneamiento.
“Más del 70 por ciento de las aguas residuales no son tratadas y no funcionan los sistemas de tratamiento de residuos, lo que supone una grave amenaza para la salud pública. Los brotes recientes de leishmaniasis podrían ser solo la punta del iceberg”, ha explicado Saccardi, para añadir que la distribución de agua con camiones cisterna “ya no es sostenible” y hay que restablecer los servicios básicos “cuanto antes”.
Fijarse en el largo plazo
El responsable de incidencia humanitaria de AH, Jean-Raphäel Poitou, ha advertido que la ayuda no puede limitarse a la respuesta de emergencia, sino empezar a integrar programas de resiliencia, como el apoyo a la agricultura, la ganadería y la generación de ingresos. AH ha destacado que tras la Conferencia pasada, celebrada en 2018, “se financiaron solo 2100 millones de los 3360 solicitados por la comunidad humanitaria”, un 62,5%.
Por último, Acción contra el Hambre “ha constatado sobre el terreno” el aumento de hogares en el que las mujeres son ahora quienes tienen que procurar ingresos y alimentos.
“Son las niñas además quienes antes dejan de ir a la escuela si la madre cae enferma o para ayudar a sobrellevar esta carga laboral externa y doméstica. También son las mujeres y las niñas quienes reducen sus raciones de comida cuando esta es escasa en el hogar”.