El próximo viernes, las calles de toda España volverán a llenarse de mujeres en las celebraciones y protestas por el Día de la Mujer y la ola feminista que desde el año pasado lo inunda todo crecerá aún más. Sin embargo, el Partido Popular se vuelve a "borrar" y ha comunicado que no participará en la manifestación del 8-M de Madrid al considerar que es una protesta "politizada y partidista".
Así lo ha anunciado la formación conservadora liderada por Pablo Casado en un comunicado en el que afirma que "tras conocer el manifiesto politizado y partidista, el Partido Popular confirma que no estará presente en la manifestación del próximo 8M".
En su nota, lamentan que "los partidos de extrema izquierda pretendan monopolizar esta convocatoria buscando la división y el enfrentamiento entre hombres y mujeres, e incluso entre mujeres de ideologías distintas".
En la mañana de este miércoles, tres vicesecretarias del PP, Cuca Gamarra, Marta González y Andrea Ley; además de Mari Mar Blanco, habían anunciado su intención de participar en la movilización que reunirá a todos los colectivos feministas en las calles de Madrid. Pero la decisión de sus líderes ha hecho que reconsideren su postura y ya han asegurado que no irán a la manifestación.
Por este motivo, el PP ha asegurado que "celebraremos el Día de la Mujer acompañados por las mujeres candidatas y junto con representantes de distintos colectivos que trabajan mirando al futuro por una sociedad en la que primer el mérito, la capacidad y la igualdad de oportunidades de hombres y mujeres. El PP leerá su propio manifiesto".
Hay que recordar, que el PP fue también el gran ausente en la histórica manifestación del 8-M del año pasado en Madrid. En aquella ocasión, la movilización estuvo caracterizada por su transversalidad y ningún partido político fue protagonista de la marcha. De hecho, las consonantes, la Comisión 8 de Marzo y el Movimiento Feminista de Madrid relegaron a las formaciones políticas a posiciones muy alejadas de la cabecera.
Tras la pancarta del PSOE, se situó el hoy presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, junto a sus compañeras de partido que copaban toda la primera fila. Sin embargo, Mariano Rajoy, el entonces jefe del Ejecutivo no participó, aunque si quiso tener ciertos "guiños" con el movimiento feminista y lució en la solapa de su chaqueta un broche morado.
Este año está previsto que el candidato socialista en las elecciones europeas, Frans Timmermans, acompañe a las mujeres socialistas en esta importante y multitudinaria marcha por las calles de la capital.