El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, se encuentra en México en la primera visita oficial de un mandatario extranjero que recibe el presidente Andrés Manuel López Obrador desde su toma de posesión el pasado 1 de diciembre. El jefe del Ejecutivo español ofreció una conferencia sobre los 80 años de exilio republicano en México, momento que aprovechó para hablar de la actual situación de Venezuela.
“En 1939 fue España. Ahora hay sirios que huyen de la guerra; africanos, que huyen del hambre; venezolanos, que huyen de un régimen hostil; y centroamericanos, que huyen de todo lo anterior”, arrancaba a decir el presidente español durante su conferencia sobre los 80 años de exilio republicano a México. “Ningún gobernante es virtuoso, ningún gobernante tiene legitimidad si sus ciudadanos se ven obligados a marcharse de su país. Dan igual las razones originales que tenga; la migración forzada y el exilio es inaceptable”.
Al acto acudieron diversas personalidades del país en un escenario escogido para la ocasión: el Colegio de México, institución fundada a partir de la Casa de España por refugiados españoles que huyeron tras la victoria franquista en la guerra civil.
Sánchez rebaja el tono pero no cede
Pese a que la conferencia era una clara reivindicación de la memoria histórica, el jefe del Ejecutivo español tuvo muy presente las urgencias sociales actuales. Sánchez rebajó el tono empleado en Santo Domingo hace unos días, donde calificó de “tirano” a Nicolás Maduro, tras la reunión de la Internacional Socialista.
El presidente español habló de “diálogo entre las dos partes”, frente a su homólogo mexicano, aunque mantuvo su postura y volvió a negar la legitimidad del actual habitante de Miraflores.
El despertar de un fascismo latente
Pedro Sánchez no se olvidó tampoco del repunte del fascismo que están viviendo algunos países europeos, como es el caso de España, donde han resurgido con fuerza “nostálgicos del franquismo”, en clara alusión a Vox.
“Hoy en todo el mundo hay nostálgicos de tiempos terribles, de los nacionalismos excluyentes, de la incomunicación y la intolerancia. En España ha vuelto a haber nostálgicos del franquismo. Apuestan por recortar los derechos de las mujeres y de los que piensan distinto a ellos. Apuestan por reivindicar lo peor de nuestra historia”, afirmó.
“No contaminemos el exilio de romanticismo ni de épica. Es una experiencia traumática”, inquirió Sánchez, que reivindicó además “la necesidad de recordar. Aquellos que sufrieron el exilio merecen, merecéis recuerdo, para que no vuelva a ocurrir nunca”, conmemorando a personajes ilustres, como el cineasta Luis Buñuel o el poeta Luis Cernuda: “Llegamos tarde, muchos compatriotas no están, pero sus obras permanecen”, reconociendo así su sacrificio.