El hasta hoy líder de la formación morada en la Comunidad de Madrid ha anunciado a través de una carta publicada en su cuenta de Twitter que deja de ser Secretario General y abandona su escaño en la Asamblea de Madrid y la portavocía en el Senado. Según sus palabras, “no se dan las condiciones para llevar el proyecto de Podemos en Madrid hacia donde creo que debe dirigirse”.
Este viernes se ha producido otro nuevo seísmo en Podemos Comunidad de Madrid. El Secretario General de la formación morada en la región, Ramón Espinar, ha presentado su dimisión en el partido y también ha anunciado que abandona su escaño en el parlamento madrileño, así como la portavocía de su grupo en el Senado.
Este nuevo movimiento se une al que se produjo hace unos días cuando Íñigo Errejón renunciaba a presentarse a las elecciones autonómicas bajo las siglas de Podemos y lo hará con la plataforma creada por la alcaldesa de Madrid, Manuela Carmena.
A través de una carta publicada en su cuenta de Twitter, Espinar anuncia que “he presentado mi dimisión como Secretario General de Podemos en la Comunidad de Madrid. También dejo mi escaño en la Asamblea de Madrid y la portavocía del Senado. Participar en un proyecto político implica compartir valores, ideas y ponerlas en marcha. Liderarlo es un ejercicio de responsabilidad que implica proponer el rumbo y dirigir el esfuerzo colectivo”.
En dicha misiva, el dirigente madrileño continúa diciendo que “En la situación actual, no se dan las condiciones para llevar el proyecto de Podemos en Madrid hacia donde creo que debe dirigirse. En estas circunstancias, dejar paso es la decisión más responsable y que creo, en conciencia, debo tomar”.
No se va, sin embargo, Espinar de su partido y afirma que “seguiré participando en política, militando en Podemos y a disposición de todos los compañeros y compañeras que me han enseñado en estos años tantas cosas. Existimos porque España necesita un proyecto de futuro para todos y eso no termina con uno u otro dirigente al frente. La responsabilidad de reconstruir una alternativa que responda a ese reto sigue siendo de todos y todas. Ojalá quienes siguen en tareas de dirección sean capaces”.
Por último, Ramón Espinar se despide “agradecido al trabajo de quienes han compartido conmigo tareas en Madrid y en el Senado. He aprendido mucho del coraje y el talento de esos hombres y mujeres. Para los y las militantes guardo la declaración de lealtad y ternura que encierra la palabra compañero”.