El Juzgado de Instrucción número 38 de Madrid no ve indicios suficientes para seguir con la causa contra Ana Botella, por lo que dicta su archivo, al considerar que no ha existido ni fraude, ni malversación, ni prevaricación. El PSOE y la Plataforma de Afectados y Afectadas por la venta de viviendas de la EMVS han anunciado un recurso a esta decisión. Ya en 2015 tuvo lugar un archivo de esta causa, aunque en su momento volvió a abrirse por indicación de la Audiencia Provincial. Por eso, tras la resolución del Tribunal de Cuentas que cifraba en casi 27 millones de euros el perjuicio al Ayuntamiento por esta venta y condenaba a pagar a Botella y su equipo casi 23 millones de euros por los perjuicios para las arcas públicas ocasionados por esta venta, esperaban que en esta ocasión la causa prosperara. El Ayuntamiento también estudia si recurre este archivo.

Hay que indicar que ambos procedimientos son distintos. Por ello, la multa de 22,7 millones de euros que el Tribunal de Cuentas impuso estimando en parte la denuncia del Ayuntamiento, que pedía 55 millones de euros, sigue pendiente. Tanto Botella como algunos miembros de su equipo que en aquel entonces formaban parte de la Junta de la EMVS fueron condenados por el Tribunal de Cuentas a hacerse cargo, de forma solidaria del pago de esta multa. Fueron declarados por el Tribunal de Cuentas responsables contables del proceso y, por ello, junto al entonces responsable directo de la Empresa de Vivienda y Suelo, Fermín Oslé, son condenados. La sentencia no solo observa irregularidades en el precio de venta, sino que interpreta que el proceso estaba ideado para dar ventaja a un competidor determinado. Así, observa ausencia de pliegos, de estudios técnicos y de garantías para la libre participación de todos los interesados. Hay que recordar que esta sentencia del Tribunal de Cuentas viene de una denuncia interpuesta por el Ayuntamiento de Manuela Carmena.