Nuevas revelaciones sobre el Caso Villarejo descubren que el comisario controló durante el año 2004 miles de llamadas de empresarios y periodistas, por indicación del BBVA, como es el caso del entonces presidente de Sacyr, Luis del Rivero, o el encargado de la Oficina Económica de José Luis Rodríguez Zapatero, Miguel Sebastián.
Esta información, desvelada por El Confidencial, ha llevado a la propia Comisión Nacional del Mercado de Valores a actuar con premura, con el fin de comprobar si ha habido injerencias patrimoniales en las cuentas del banco e incluso en la seguridad del propio organismo.
También se está investigando la vulnerabilidad del presidente de la CNMV durante estas fechas, Manuel Conthe, y su vicepresidente, Carlos Arenillas, ya que podría haber existido un riesgo de fuga de informaciones confidenciales.
El BBVA responde
Tras darse a conocer el espionaje masivo, supuestamente a petición del BBVA, el banco no tardó en emitir un comunicado: “En relación con las informaciones publicadas sobre el Grupo Ceny [la empresa del comisario] que de ser ciertas revestirían una indudable gravedad, BBVA manifiesta que en junio de 2018 inició una investigación sobre la contratación y los servicios prestados por dicha empresa. Además, solicitó a un despacho externo de abogados una revisión independiente de los hechos y de la documentación disponible. Ambas actuaciones están en curso en la actualidad”.
La entidad bancaria advierte que “si en las investigaciones se acreditara la existencia de irregularidades, BBVA tomará las medidas internas que procedan y llevará a cabo las acciones judiciales pertinentes, y como siempre, colaborará con la justicia”.
Un espionaje muy lucrativo
Según los documentos a los que ha accedido El Confidencial, Villarejo proporcionó al BBVA el contenido de unas 15.000 llamadas telefónicas. Gracias a esto, la dirección de la entidad se adelantó al intento del denominado “Grupo Hostil”, un círculo de “empresarios y políticos” que supuestamente “intentaron desalojar a González de la presidencia”.
BBVA habría financiado la respuesta del comisario con al menos 517.600 euros. Un contragolpe que consistió en implicar al Gobierno socialista en la intentona de Sacyr. Pero aquí no acaba su lucrativa relación comercial, cabe recordar que hace solo unas semanas, el banco confesó haber pagado alrededor de cinco millones de euros a Villarejo entre 2012 y 2017 por indicación del “departamento de seguridad”. De hecho, el que fuera presidente del BBVA señalaba a El País Semanal no tener idea de los trabajos de inteligencia que llevaba a cabo la entidad, echando balones fuera sobre la responsabilidad de las escuchas masivas.