El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, tiende la mano a todos los grupos políticos, incluidos PP y Ciudadanos, para sacar adelante unas cuentas “para que España avance en política social, crecimiento económico y en creación de empleo y dignidad laboral”.
El jefe del Ejecutivo, Pedro Sánchez, ha anunciado en una entrevista con la Agencia Efe que este viernes 11 de enero su Gobierno aprobará el anteproyecto de ley de los Presupuestos Generales del Estado, tal y como adelantó el pasado mes de diciembre. Tras su aprobación, la ley de presupuestos tendrá que someterse a debate parlamentario y a votación en el Congreso de los Diputados.
Actualmente, el Gobierno no tiene asegurados los apoyos necesarios para sacar adelante las Cuentas Públicas por ello tendrá que negociar con otros partidos. En principio, tiene el apoyo ya de Podemos y las confluencias con quien firmó el pasado mes de octubre un acuerdo en el que se incluía medidas como la subida del salario mínimo (ya aprobado), mayores prestaciones sociales y subida de impuestos para las rentas más altas.
Pero, además, el Gobierno necesitará convencer a PNV, PdCAT y ERC para que den luz verde a las cuentas públicas. Cono los nacionalistas vascos la negociación será más sencilla que con los partidos catalanes. Desde Euskadi hay predisposición para sentarse a negociar las cuentas, pero tanto PdCAT como ERC tensan la cuerda para negociar paralelamente a los presupuestos un acuerdo político que dé salida a la grave crisis política que se vive en Cataluña. Sin embargo, desde Moncloa se insiste en que no tiene que ver una cuestión con la otra. De todas formas, tras la celebración del Consejo de Ministros en Barcelona y el encuentro entre el presidente del Gobierno y el de la Generalitat se abrió un canal de diálogo que llevaba mucho tiempo cerrado. Precisamente, ambos dirigentes se volverán a reunir el próximo 20 de enero en Moncloa.
Pero el Ejecutivo socialista también abre la puerta a Partido Popular y Ciudadanos para sentarse a negociar estos presupuestos. Se trata de una tarea complicada ya que ambos grupos acaban de bloquear en el Senado la nueva senda de déficit que el Gobierno consiguió sacar adelante en el Congreso. Se trata de pasar de un 1,3% a un 1,8% de déficit lo que supondría poder dedicar más de 6.000 millones de euros extra para las Comunidades Autónomas.
Sin embargo, el presidente, ha afirmado que “no solamente vamos a mirar a las fuerzas independentistas sino también a aquellas fuerzas parlamentarias que están pidiendo no depender solamente de las fuerzas independentistas para poder sacar los presupuestos. Le vamos a tender la mano a Ciudadanos y a PP. Creo que es importante que los buenos datos que hay de crecimiento económico y de creación de empleo se consoliden en el año 2019”.
“El año 2019 puede ser el primero después de esta década perdida de crisis económica donde el paro se reduzca por debajo de los tres millones de personas y tengamos más de 19 millones de afiliados en la Seguridad Social”, afirma Sánchez.
“Por tanto, -continua el presidente- creo que se tiene que crear empleo y seguir creciendo económicamente y también se tienen que dignificar tanto las condiciones laborales como salariales y, sobre todo y fundamentalmente, lo que tenemos que hacer es cohesionar desde el punto de vista social y territorial a nuestro país”.
El presidente del Partido Popular ya ha respondido al ofrecimiento del Gobierno y ha afirmado esta misma mañana que "Yo me he mostrado dispuesto a negociar los Presupuestos en los momentos posteriores a la moción de censura y si cumplían tres requisitos: respetar la senda de déficit, bajar los impuestos y reducir la deuda pública. Y nada de eso se ha mantenido".
La aprobación de los presupuestos daría al Gobierno socialista la posibilidad de agotar la Legislatura y llegar hasta el 2020, por lo que el Ejecutivo debe agotar todas las posibilidades. En su entrevista con la Agencia Efe le cuestionan por su cambio de planteamiento ya que cuando se presentó la moción de censura anunció que se convocarían elecciones cuanto antes. Pero el presidente, nuevamente, aclara lo que ya ha repetido en otras ocasiones “lo que dije fue que por supuesto estaba abierto a hablar con distintas fuerzas parlamentarias para ver cuándo podíamos convocar esas elecciones, pero lógicamente esas fuerzas parlamentarias votaron en contra de esa moción de censura. Otras fuerzas parlamentarias con las cuales ahora mismo tenemos una mayoría en el Congreso de los Diputados que nos permite sacar adelante muchas de estas leyes lo que quieren, precisamente, es la estabilidad y agotar la legislatura”.
Si el Gobierno no logrará sacar adelante sus cuentas públicas la legislatura se complicaría para los socialistas. Sin embargo, lo que ha descartado casi absolutamente el presidente es un “super domingo electoral”. Barones socialistas se oponen con fuerza a esa posibilidad ya que unas elecciones generales el mismo día de las elecciones autonómicas viciaría e influiría en el resto de comicios.