Una fuerte recesión y la incidencia de la devaluación monetaria que se “traspasó a los precios y condujo a una elevada inflación”, ha provocado que un 33,6 por ciento de la población sea pobre según el informe publicado por el Observatorio de la Deuda Social Católica Argentina (UCA).

Es en el tercer trimestre del presente año que en Argentina se registró el nivel más elevado de pobreza, al menos en comparación de los últimos diez años con un incremento de hasta cinco puntos porcentuales, es decir, unas 2.2 millones de personas más respecto del año 2017.

En el tercer trimestre del 2017 la pobreza aumentó del 28,2% al 33,6% en la actualidad, fenómeno que se registró en el 2016, aunque la problemática afectó al 32,3% de la población.

La UCA señaló la persistente infantilización de la pobreza en la Argentina urbana, afectando a los menores de edad y adolescentes que alcanzan hasta los 17 años, así como a los de 29 años.

Señalaron la desfavorable creación de empleo, por el contexto macroeconómico “con algunas consecuencias respecto de las posibilidades de volcar mas trabajadores al mercado laboral por parte de los hogares”.

La actual situación por la que el país atraviesa, significa un retroceso en términos de desigualdades, ya que según los datos emitidos por el observatorio el pasado jueves un 6,1% se encuentra en la indigencia.

En el informe señala que los datos podrían mantenerse hacia el 2019, pues los números arrojados por este índice se realizan en unos 5.800 casos de todos los conglomerados urbanos del país con mas de 80.000 habitantes y toma en cuenta una muestra por ingreso aunque hay datos mas ampliados de la situación de pobres o indigentes.

De acuerdo a la información emitida a través de una de las estadísticas del UCA, denominada “Ingresos familiares. Indigencia y pobreza monetaria en pesos, porcentajes de hogares, en porcentaje de población”, durante el tercer trimestre del 2018 la pobreza ha alcanzado el 25,6% de hogares, además de que el ingreso total familiar solo es del 40.90%

Las cifras emitidas por el UCA evidencian a un gobierno que no ha logrado el objetivo de reducir la pobreza y por el contrario, se han mantenido lejos de la promesa presidencial de alcanzar una pobreza cero en Argentina.

El nivel de seguridad alimentaria en el país actualmente es del 20% del total de la población y la inseguridad alimentaria severa, por lo que es hasta un 7,9% que pasan hambre.

La Agenda para la Equidad (2017-2018) en porcentajes de hogares y población, la inseguridad alimentaria severa en hogares durante el 2018 ha trastocado al 6,0%, además la inseguridad alimentaria severa en personas ha llegado a un 7,9% , la insuficiencia de ingresos se refleja en el 48,8% de hogares y tan solo el 13,4% tienen una capacidad de ahorro.

Finalmente del 2010 a la fecha, el incremento de la pobreza en Argentina, ha sido significativo y alarmante, por lo que los creadores del estudio atribuyen los resultados a que no ha existido en la ultima década una clara política publica de la distribución de ingresos, provocando con ello que la pobreza no pudo desterrarse.