La primera ministra británica afrontará esta tarde una moción de censura de su grupo parlamentario tras la petición de 48 diputados ‘tories’ de esta medida
El lunes pasado Theresa May anunciaba en la Cámara de los Comunes que aplazaba ‘sine die” la votación del Acuerdo alcanzado entre el Gobierno Británico y la Unión Europea para la salida ordenada del país de las instituciones europeas. Este aplazamiento se debía a que la primera ministra no cuenta aún con apoyos suficientes para sacar adelante este acuerdo. Igualmente anunciaba que volvería a Bruselas a pedir más seguridad en su salida del club comunitario. Desde Bruselas ya le han contestado que no se moverá ni una coma de ese acuerdo. Todo ello ha supuesto que este acuerdo pueda ser el que acabe con el liderazgo de May de su partido y su caída como primera ministra del Reino Unido.
Esta misma mañana, Graham Brady, presidente de la Comisión 1922 de la Cámara, anunciaba que ya se han reunido los 48 votos necesarios para que se produzca una moción de censura en el seno del grupo parlamentario del Partido Conservador para relevar a May al frente del grupo y, por tanto, del Ejecutivo británico. La votación se producirá esta misma tarde y la dirigente ‘torie’ necesita una mayoría de votos a favor para poder continuar liderando a su partido y el Gobierno.
La primera dama ya ha anunciado que descarta presentar su dimisión “haré frente a la moción con todo lo que tengo”, ha afirmado desde Downing Steet. May ha dicho que está lista para “terminar el trabajo” y ha defendido que todo lo que ha hecho ha sido por el “interés nacional”, incluido el Acuerdo de Retirada que está ahora mismo debatiéndose en el parlamento.
Para May, “un cambio de liderazgo en el Partido Conservador pondría en riesgo el futuro del país” y ha avisado que un cambio en el liderazgo ahora no cambiaría “los fundamentos de la negociación y la aritmética parlamentaria”.
La jefa del Ejecutivo ya ha recibido apoyos de miembros de su Gobierno. A través de Twitter, el ministro de Asuntos Exteriores, Jeremy Hunt, ha afirmado que “Apoyaré esta noche a Theresa May. Ser primer ministro es el trabajo más difícil que se pueda imaginar hoy y lo último que el país necesita es una larga y dañina disputa en el liderazgo. El Brexit nunca va a ser fácil pero ella es la mejor persona para garantizar que realmente nos vamos de la Unión Europea el 29 de marzo”.
Otro de los apoyos ha sido el titular de Interior, Sajid Javid, “La última cosa que nuestro país necesita ahora mismo una elección en el liderazgo del Partido Conservador. Se verá como equivocado y autoindulgente. La primera ministra tiene mi pleno apoyo y es la primera persona para garantiza que dejamos la Unión Europea el 29 de marzo”.
Y el ministro de Gobierno Local, Vivienda y Comunidades, James Brokenchire, ha enviado un mensaje a May en el que afirma de forma nítida “mi fuerte apoyo para continuar como líder de los conservadores y como primera ministra. Ahora no es el momento para esta distracción y para más incertidumbre. Tenemos que apoyar a la primera ministra por el interés de nuestro país”.
El brexit, que los euroescépticos ven como la panacea y la solución a todos sus males, amenaza una vez más con una ruptura mayor en el Reino Unido. Una salida por las bravas de la UE supondría una catástrofe económica como anuncia el Banco Nacional del Reino Unido. Y la votación contra el Acuerdo firmado ya con Bruselas significa justo eso que los Británicos están dispuestos a salir el próximo 29 de marzo de Europa de la forma que sea. Si no aceptan el acuerdo se presume una crisis económica, política y social sin precedentes.
Ahora Theresa May debe hacer frente a una moción de censura que lo único que puede hacer es debilitar a la persona encargada de convencer a sus parlamentarios sobre la bondad del Acuerdo alcanzado. Sin embargo, la salida del laberinto del brexit parece hoy más lejana que nunca.