Sólo es un primer paso, pendiente de definir las cantidades proporcionales a las prestaciones, insisten los negociadores del ministerio de Trabajo, pero de momento, la ATA, la UPTA y otras asociaciones se felicitan porque lo consideran un paso de gigante a la hora de equiparar los derechos de todos los trabajadores. Al fin los autónomos han ganado una larga batalla en la obtención de sus derechos.

Para ser emprendedor se necesitan dos ingredientes básicos: visión y audacia. Hasta ahora, los autónomos se veían obligados a tener una salud de hierro. Si no trabajaban no había ingresos. En tiempos de bonanza, si les iba bien ganaban mucho, pero en tiempo de crisis podían perderlo todo. Hasta hace unos días vivían ajenos a las ayudas y prestaciones del Estado. Según ATA y UPTA se calcula que hay un millón doscientos mil autónomos en España, y estiman que cada uno crea una media de dos a tres puestos de trabajo. Son tres millones de puestos de trabajo que genera la clase laboral más abandonada del marco político español. Una desigualdad que podrían ser subsanada para 2019, pendientes de las últimas decisiones del ministerio.

Según comentó Lorenzo Amor, presidente de la ATA, Asociación de Trabajadores Autónomos, la pasada semana consiguieron rebajar las primeras propuestas de incremento que la ministra Valerio les había planteado y así poder llegar a mejoras sustanciales. Incremento que, según dijeron Amor, y Eduardo Abad, presidente de UPTA, va en la línea del pago de las cuotas en los últimos 15 años. Sesenta euros al año.

Los colectivos de autónomos están esperando que el ministerio de Trabajo apruebe en breve las condiciones del Pacto y den a conocer los detalles de las prestaciones que empezarán a disfrutar en 2019. Tendrán derecho a paro, cursos de formación, contingencias profesionales y a percibir el cien por cien de la bonificación por incapacidad temporal. La subida de las cuotas también será proporcional a las cantidades facturadas, lo cual favorece a los pequeños autónomos que tenían un suelo que no bajaba de los 277 euros mensuales.

El Gobierno advierte que necesitan hacer cálculos para saber si con ese incremento "es suficiente para pagar las prestaciones". De momento se muestra cauto e insiste en que son pasos adelante pero no definitivos. Dado el aumento de la base del 1,25%, si los tipos llegaran a ese 31,4%, las cuotas aumentarían hasta unos 222 euros al año, para los trabajadores que solo coticen en la actualidad por incapacidad temporal. En el caso de que los tipos de cotización solo ascendieran al 30%, la cuota a pagar aumentaría 64 euros.

El derecho a paro propuesto para los autónomos se ampliará al total de trabajadores que paguen los incrementos. También duplicará la duración de la prestación de paro que actualmente sólo percibe una pequeña cantidad de autónomos. Éstos pagaban un incremento demasiado alto como para que les compensara. Así, según Lorenzo Amor, "ya no se denegarán el 70% de los casos que solicitaban esta ayuda". Por otra parte, desde el primer día se cobrará la prestación por contingencias profesionales. En cuanto al darse de baja por enfermedad, dejarán de cotizar a partir del segundo mes de baja, uno de los lastres que seguían soportando los autónomos, ha asegurado Eduardo Abad., presidente de Upta.

En cuanto a la tarifa plana, como ha informó lahoradigital.com, una modalidad de ayuda a aquellos autónomos nuevos que no podían pagar las tarifas ordinarias mínimas, de 277 euros, con estas medidas subirá a 55 o 60 euros al mes, por las prestaciones que ofrecerá a partir de ahora. Todos están ahora pendientes de la Mesa Técnica que irá definiendo los porcentajes, la base mínima de cotización subirá un 1,25 por ciento tanto para persona física como societario, para el próximo año.

Los autónomos son imprescindibles para el progreso de un país. Son perfiles que desde pequeños, en lugar de soñar con hacer una oposición y ser funcionario del Estado, sueñan con ampliar el negocio familiar, abrir una tienda, montar una empresa o desarrollar una App. Son emprendedores que generan millones de puestos de trabajo y que hasta ahora ellos mismos no tenían red social ante contingencias laborales. Es un gran paso adelante y era un derecho, dicen fuentes de las asociaciones, que al fin el gobierno de Sánchez junto con sus aliados de Podemos se hayan decidido a estudiar las necesidades de este colectivo.