“El capital más importante de mi empresa es el Capital Humano por eso invertimos tanto presupuesto en la formación”. Esta declaración es común a muchos directores de empresas. Las inversiones en formación se producen especialmente cuando se presentan profundos cambios en los modelos culturales o productivos de las empresas, en muchos casos como necesidad de adaptarse a los cambios sociales que condicionan el mercado.
Por añadido estas opiniones también son aplicables a todas las organizaciones entre las que podemos encontrar las normativas con autoridad moral (1) donde la importancia se encuentra en la pertenencia al grupo, con recompensas de valor intrínseco y nunca de valor económico (organizaciones políticas, entre otras).
Para que las organizaciones alcancen sus objetivos, las personas que la integran deben coordinar sus esfuerzos para lograr lo que no podrían conseguir actuando aisladamente. Por ello se establece una interacción psicológica entre los responsables y los componentes bases o militantes de la organización, a través de lo que se denomina proceso de reciprocación (correspondencia mutua) (2). En las organizaciones normativas sus miembros suelen pertenecer a ellas porque comparten sus valores y desean cumplir con lo que moralmente es lo lícito.
En el caso de los partidos políticos la reciprocación supone, para los responsables a distintos niveles, el aplicar las reglas aprobadas para su funcionamiento (estatutos, reglamentos, congresos...) y la reciprocación corresponde a la aceptación de las mismas por los militantes o componentes de base.
Cuando este equilibrio es la forma habitual de funcionamiento, la organización política desarrollará su función en armonía, con las mejores condiciones, para obtener sus objetivos. En ese caso el militante se siente participe, solidario, implicado y propietario de las acciones del partido. Sin embargo cuando la reciprocación se rompe, aparecerán nichos de disconformidad que alteran el normal desarrollo de la vida interna de la organización política con evidente debilitamiento de la posibilidad de lograr los objetivos y por tanto del aprovechamiento por los ciudadanos de las medidas políticas que se habrían implantado en el caso de paz interna en la organización.
En estos casos, además de la turbulencia propia de la organización política, el perjudicado será siempre el ciudadano. Y no debemos olvidar que el principal objetivo de las organizaciones políticas progresistas es el mejorar la calidad de vida de los ciudadanos.
La ruptura de la reciprocación puede tener su origen en el interés de algunos responsables en potenciar intereses ajenos, con olvido o malinterpretación de las reglas aprobadas, para beneficios propios o de individuos próximos. Existen otros casos que merecen la pena destacar como es la toxicidad de algunos responsables políticos que no son líderes naturales sino responsables impuestos por los responsables superiores por motivos de proximidad personal, nepotismo, sumisión mal entendida como lealtad, o como garantía de apoyo incondicional, entre otras razones.
El comportamiento de los responsables tóxicos se manifiesta en el bloqueo de iniciativas ajenas, en la no aceptación de ideas diferentes a las propias, y el acogerse exclusivamente a la letra sin consideración del sentido de la misma. El caso de los responsables tóxicos no merece más comentarios pues son más frecuentes de lo que aparenta, se detectan fácilmente y además existe mucha literatura al respecto.
No olvidemos que el militante es bastante más que un miembro de la organización. Tiene 4 componentes que condicionan su actitud y que irradia sus posicionamientos fuera de la organización. En caso de falta de reciprocación incluso puede resultar dañino para la propia organización. Los cuatro componentes son:
COMPONENTES DE LA ORGANIZACIÓN = MILITANTES + CIUDADANOS + CLIENTES + CONTRIBUYENTES (3)
El militante tomará posición ante la ruptura de la reciprocación.
El ciudadano adoptará una decisión sobre la atención recibida por la administración en los servicios ofrecidos.
El cliente valorará los servicios que entrega la administración, sin favoritismo o corruptelas.
El contribuyente exigirá la calidad y coste de entrega de la administración a cambio de los impuestos abonados.
Con la aprobación de las resoluciones del 39 Congreso los socialistas españoles se han dotado de una magnífica herramienta para que no se produzca la ruptura de la reciprocación. Esta solución regeneradora a la crisis de identidad que sufrieron los socialistas españoles en la etapa anterior al actual secretario general y presidente del Gobierno ha de hacerse buena si su posterior aplicación se realiza de forma correcta, en todos los niveles de la organización, con el respeto debido a los auténticos protagonistas del cambio interno que son los militantes.
Aunque la sintonía entre la labor del actual gobierno socialista y sus militantes, en su inmensa mayoría, disfruta en estos momentos de una reciprocación íntegra, sin fisura, ninguna organización es ajena a las tentaciones de la ruptura de la reciprocación en los distintos escalones del poder organizativo, ni al intento de cambio de rumbo que se aleje de las reglas aprobadas, ni de los intentos de anteponer los intereses propios al respeto a los estatutos y reglamentos aprobados, ni de intentar imponer los intereses personales sobre los de los objetivos corporativos, ni siquiera de situar en lugares de responsabilidad y toma de decisiones a responsables tóxicos pero incondicionales.
El valor más valioso de los socialistas, al igual que las empresas que marcan las tendencias en el mundo económico y de nuevas tecnologías, son sus militantes, es el factor humano. La reciprocación es una de las claves que nos guiará por el mejor camino para que el Sr. Godot nos visite para darnos la buena nueva del reto socialista de Madrid-Ciudad, según comentamos en el primer episodio dedicado al reto socialista de Madrid.
“Si alguno de los lectores cree que la militancia no es el capital de mayor fortaleza de los socialistas que gire su mirada al pasado y pruebe sin militantes”.
1.- Basado en Etzioni “A Comparative Analysis of Complex Organizations”
2.- Levinson” Reciprocation the relationship between Man and Organization”. A. W. Gouldner ”The norm of reciprocity”. Harcourt Brace Jovanovich ”Social Behavior Its Elementary Form”
3.- Guerrero “La gestión de la Calidad Total en los ayuntamientos españoles: modelos y experiencias.” (Instituto Nacional de Administración Pública).
Manuel Guerrero Cuadrado
Ingeniero Superior Naval
Doctor en Ciencias Políticas en Gobierno Y Administración Pública
Diplomado en Estudios Avanzados en Organización de Empresas
Autor del libro “La gestión de la Calidad Total en los ayuntamientos: modelos y experiencias”